viernes, 28 de enero de 2011

Una vez aprendí que para deleitarse con el mundo hay que despojar los antifaces
y los tintes de más. Aprendí sobre la sumisión natural y la tolerancia humana.
Me transitaron muchas cosas. Repudié mi ánima y mi consideración, extravié mi
translucidez, abominé -o al menos eso creí-, pero nunca, jamás dejé de amar.
A menudo hay que admitirse maltrecho. El costurón se concibe una cura, se hace
un glóbulo de sabiduría, por ende de protección.
Aún anhelo despertar, desanudar mis botas, despojar mis disfraces, y mis
espectros. Porque ulteriormente, soy idónea de transformarlo todo.
No se trata de ser alimaña, un superior, de prescindir la esencia para ser notado.
No podemos concebir y alterar si abandonamos nuestra entidad.


lunes, 10 de enero de 2011


me daba vértigo sentir
porque no había pulmón
si no había pulmón
había nada,
un hormiguero incendiado
una cancha de derrota
la guerra del cariño, te conmovió.
sos desperdiciando, siempre a pulmón
amortajando en el mismo lugar
donde fuiste flor, amor, tu pulmón.

me daba vértigo sentir
porque no había pulmón.

hoy.
hoy un día plomizo.
hoy día marioneta viva.
hoy marioneta canción que se alegra.
marioneta canción sólo por eso.
hoy todos sabían.
hoy querían.
hoy no juzgaba.
hoy sabía jugar, sabía a jaguar, sabía a jugo de sabia.
hoy no entendiste el reflejo, tu ira natural y por mes no funcionó.
hoy está bien.
está bien, hoy.
vulgar, corriente.
de lo corriente a lo tordo, lo mismo.
hoy, era.